De casa en casa… así pasamos ayer una angustiosa jornada con Zöe, tras acabarse de forma inminente su primera acogida y trasladarla a un nuevo hogar de acogida temporal. Este proceso es muy traumático para un perro miedoso como Zöe, que se había acostumbrado a la convivencia con unas personas y que ahora debe volver a conocer otro entorno distinto.
Un rato antes del intercambio, paseamos a Zöe con un semi-vendaje de Ttouch para relajarla y garantizar una mejor entrada en el nuevo hogar donde le esperaban con todo el cariño del mundo.
La venda corporal amplía la percepción del propio cuerpo, haciendo que se sienta más segura en sus movimientos. Este vendaje es muy fácil de aplicar y está especialmente recomendado para perros miedosos o hiperactivos.
¿CÓMO SE APLICA?
Existen diferentes variaciones: de cuerpo entero, de medio cuerpo, de cabeza, de patas, etc… En este caso, hemos aplicado a Zöe el vendaje de medio cuerpo colocando la banda por delante del pecho, cruzándola por debajo y atando los extremos en la espalda teniendo cuidado de que el nudo no quede justo encima de la columna vertebral, sino ligeramente de lado.
Siguiendo el dibujo es fácil reproducir la colocación del vendaje en las situaciones de estrés de cualquier perro. Conviene que la presión no sea ni muy floja ni muy fuerte y que el tiempo máximo de vendaje esté entorno a los 15-20 minutos, para que el cuerpo no llegue a acostumbrarse a él.
BENEFICIOS
En el caso de Zöe, observamos que, antes de salir del coche, se mostraba inquieta, mirada temerosa, muy alerta. En los primeros segundos del paseo su colita permanecía baja y pegada sus patas.
Tras 15 minutos de paseo con el vendaje, Zöe empezó a relajar la postura corporal, la colita ya no estaba tan baja y usaba la nariz para olfatear y curiosear en el entorno. La pequeña estaba más receptiva para entrar en su nueva casa de acogida.